Hello. Me estreno hoy, 10 de enero, con esta newsletter. Llevo con la idea en la cabeza meses, y sin ser consciente del todo quizá un par de años. El mes de diciembre tenía claro que empezaría en enero, el 1 si pudiese ser, es un día importante para mí. El 1 lo único que dije fue que “iba a empezar una newsletter (NL)”. Esto me pasa mucho, por eso estoy hoy, unos días más tarde, empezando.
De las ganas máximas he pasado al vértigo máximo. Tiene narices. Lo había leído varias veces y siempre que un escritor decía lo que le imponía una hoja en blanco me parecía una exageración. Me parecía una exageración porque son escritores, profesionales de lo que viene siendo escribir. Pero no sé si será porque yo no soy escritora o porque de verdad impone estrenar una pantalla en blanco, la realidad es que no me arrancaba a hacerlo.
La chorrada que ha desencadenado que hoy te envíe este NL es que es 10. Y el 10 me gusta. Me gusta muchísimo. Suena un poco prepotente, lo sé. Este tipo de cosas me mueven a tomar la decisión: “de hoy no pasa”.
Supongo que si me estás leyendo es porque me sigues en insta, o porque eres de mi familia (extendiendo el concepto “familia” a mis amigos). No espero mucho más con el primer post.
El nombre del NL “had me at hello”, también es como lo del día 10. Más o menos el año pasado, en una conversación de mi chat familiar, una de mis hermanas usó esta expresión “she had me at hello”: primera vez en mi vida que la escuchaba (leía). No me niegues que suena bien. Y su significado lo he experimentado muchas veces: que alguien me gane con un “hola”. A veces no es un “hola” como tal, es un gesto, un comentario, una manera de ver la vida, un plan. En cualquier caso es un momento que me genera confianza. Y de verdad, creo que la confianza mueve el mundo. Algunos dicen que es el amor, otros que el dinero. Pero sea lo que sea, la confianza les precede.
Y de esto escribiré cada vez que te llegue este NL. De esto, pero muy random… porque ni te imaginas la capacidad que tengo para unir la confianza con un montón de cosas que me pasan.
También me daré a conocer por aquí, poco a poco. Algún dato que ahora ni te importa, alguna anécdota que como mucho de primeras te hará gracia… o no. Pero quiero pensar que poco a poco, dándome a conocer, cogerás confianza con quien te escribe.
Con esta NL la idea es poner “rostro” a quien está detrás de @saintips desde 2015, al menos en cuanto a diseño se refiere. Venga, te pongo una foto para que me pongas cara:
Que en la primera quedada ya tengas una foto mía es mucho eh? A veces una foto como esta puede ser el comienzo de un “had me at hello”. Pero tiene que ser como ésta.
Mientras escribo voy calculando el tiempo que tardarás en leerme, y no quiero pasarme de 10 minutos. Por eso de que hoy es 10, sabes? El equilibrio tiene sus reglas. Otra regla es que no quiero torrarte, al menos hoy que es mi carta de presentación.
Te decía que desde 2015 diseño frases de santos en una cuenta de instagram. Empecé a hacerlo por otro motivo, como muchas de las cosas que empiezo. Pero en este caso además se unió que me gusta unir mensajes potentes con diseños atractivos, o que al menos llamen la atención. Y sacar a los santos a la luz, a la luz de las redes sociales, desempolvarlos de los libros que han escrito o se han escrito sobre ellos y ¿por qué no? ser su agencia de comunicación. Me pareció que se lo debía, no sé por qué. Te diré que no siempre lo he conseguido, y que aunque es una idea en la que creo, la constancia me cuesta. Aunque mi eslogan podría ser el “lo hago porque me da la gana” y por eso no sufro nada si no publico a diario o incluso semanalmente.
Tengo muchas notas en el móvil con ideas y frases que diseñar (por eso abrí más cuentas de insta, es un poco contradictorio porque a menos tiempo, más cuentas), pero a veces no encuentro el momento para ponerme a diseñar. O no lo busco. O no está en mis prioridades, al menos en ese momento.
Mi idea también es poder contarte de dónde saqué las frases, lo que han significado para mí, e incluso cuál ha sido el proceso creativo. Que muchas veces no es que lo haya habido, pero sí podría decirte de dónde partió la idea.
En ese 2015 yo no tenía ni idea de diseño gráfico, ahora tampoco. No es por humildad, en serio, ahora he aprendido a “componer”: cojo de aquí, de allí, me inspiro en algo que vea en la calle, en insta… y hago un cóctel molotov que emborrache los corazones. Que te llegue, empezando porque me llegue a mí. A veces lo consigo, a veces no tanto. Muchas veces ni sé cuál es el alcance de lo que estoy haciendo. Porque sí, me gusta que me den like y que compartan, guarden y comenten… pero el verdadero alcance no lo sabré hasta que tenga que saberlo. Y vivo tranquila, sin angustiarme por el algoritmo de insta. Mi algoritmo es que siempre quiero hacer más, eso es lo que enciende la chispa de mi creatividad.
Pero bueno, te decía que no soy muy constante. Por eso ahora me estoy leyendo un libro que me recomendaron (esto no es #publi, es un “had me at hello” (en adelante “hah*”) que quiero compartir): “Hábitos atómicos”, de James Clear. Y me está descubriendo cosas muy básicas. Lo sencillo, lo básico, a veces por querer complicarlo, se nos va de la cabeza. El caso es que parte de empezar hoy esta NL, aparte de por ser 10 de enero, es por este libro… fijo. Te iré hablando de ello.
Mi idea de escribirte es que fuera mensual, pero ahora me gustaría escribirte mañana mismo, porque se me ocurren cosas que contarte, pero creo que va a ser mejor darnos un mes. Si te escribo en unos días no me lo tengas en cuenta, que soy principiante. No siempre tendrán que ser 10 minutos.
Es más, ahora la calculadora de tiempo me dice que hemos llegado a los 8 min. 22 seg. Así que lo dejo aquí y me reservo el minuto y medio que me queda por si te escribo antes del 10 de febrero.
Te pediré feedback aquí en comentarios, en mi mail o en stories.
Hasta aquí nuestro primer encuentro. Nice to meet you!